Me encontraba mirando la televisión cuando paso un terrible
comercial de umbrella.
Como siempre, dicen que sus drogas “ayudan” a curar
cualquier tipo de dolor de algo.
No aguante más la estupidez y cambie automáticamente de
canal. Era mi día libre, a si que quería aprovecharlo yendo a dormir unas
cuantas horas.
Cuando me desperté vi que mi comunicador tenía 3 mensajes y
7 llamadas perdidas, en ese momento me arrepentí de haberlo apagado antes de
dormir. Las llamadas era de el gobierno llamándome por una infección en la casa
blanca, no lo podía creer que se allá infectado el lugar donde tenia que
trabajar mañana. No solo eso me asusto si no que estaba el presidente que es un
amigo mío. Al llamar a la recepción de la cada blanca me contesto la secretaria
del presidente.
-to…- me interrumpió la joven chica
-¡¡¡ayuda!!!- se oía totalmente desesperada y en el fondo se
escuchaba a las bestias queriendo entrar a la habitación- no te preocupes ya
esta vendada-
- escucha necesito que me digas donde esta el presidente-
- ja el presidente… - se hizo un silencio muy largo – él
esta muerto- pude escuchar romperse la puerta y los gritos de aquella
chica.
Al final se corto la línea. Cargue todas mis armas y
municiones. Abrí la puerta y tome prestado un auto. Cuando iba conduciendo la
ciudad ya estaba enterada de la infección, creo que un par de zombies me rompí
la ventana de atrás. En el camino podía ver como los infectados comían a las
pobre personas que solo querían escapar y ahora como el gobierno acabara con
todo esto, no creo que aya gobierno cuando llegue.
Ya llegue, Salí del auto y me dispuse a entrar al matadero
de los políticos.
Pero tenia varios problemas, como iba a ser para pasar mas
allá de la reja sin que crean que soy un infectado, y fue en ese momento me di
cuenta que la reja ya estaba rota y sin ningún policía ni franco tirador, mi
pregunta pareció muy estupida en ese momento.
Al pasar por mis supuestos problemas entre a la casa blanca
por una ventana rota y saque mi arma para matar a tres zombies que venían hacia
mí. No quería peder tiempo en ayudar a las personas, ahora que lo pienso deje
morir a muchos. Al llegar a su habitación, entre y la mujer me quería morder,
no podía dispararle por que me tenia mis manos ocupadas en ella. Al fin la
empuje y le dispare, después me dirigí a
la habitación presidencial pero, al entrar vi la cosa mas horrorosa que nunca vi, mi
esfuerza tirado en el piso. Todo por lo que trabaje ahora estaba perdido, al
levantar mi arma y dispararle un zombie salio de la nada.
Corrí al lugar mas seguro para mi parecer, era una
habitación de máxima seguridad, entre y pude ver la sangre que salía de mi
brazo. Ya era el final, nada mas quedaba, no quería ser un infectado mas y con
todo mi valor jale gatillo.
Me desperté en mis lágrimas y sudor, me senté en mi cama y empecé a llorar. Luego
salte de mi cama y vi mi celular, no había nada, pude respirar de nuevo. Llamé a
la casa blanca, esperando la secretaria atendió y le pedí ver la citación del lugar, ella extrañada me dijo que la casa
blanca estaba bien y sin ningún problema.
Después de esto, los días libres no son para mí.
Su admi samira a. barhich <3
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